Preguntas frecuentes acerca del medio ambiente

8. ¿Cuáles son las causas y consecuencias de la contaminación del medio ambiente?

La contaminación ambiental en general se produce cuando ciertos elementos causantes de efectos nocivos se acumulan en cantidades que la naturaleza no puede reciclar. Reducir la contaminación del medio ambiente es un gran reto que tiene por delante la humanidad. La participación de todos es necesaria y ésta puede ser desde dejar de lanzar objetos al agua hasta la incorporación a programas de activismo ambiental.

Contaminación y escasez de agua.

Los contaminantes del agua comprenden desde una bolsa de plástico lanzada al mar, hasta una lata de refresco a un río. Muchas ciudades vierten en ríos, lagos y mares grandes volúmenes de materia fecal, microorganismos patógenos, detergentes, gases insolubles, basura, etc.

Las aguas residuales de los vertederos industriales contienen aceites, fosfatos, nitratos, fluoruros, plomo, arsénico, selenio, cadmio, manganeso, mercurio, etc. También es importante considerar los derrames petroleros, etc. Muchos de estos contaminantes pueden tardar cientos y hasta miles de años en ser reciclados por la naturaleza.

Entre las enfermedades que pueden transmitir las aguas no tratadas podemos citar la diarrea, la disentería, el cólera, el paludismo, la esquistosomiasis, la fiebre tifoidea, la amibiasis, entre otras.

En cuanto a la escasez de agua, el Foro Económico Mundial y otras instituciones calculan que para 2030 la demanda será 40% más alta que hoy día, incremento que el planeta no podrá suministrar, a menos que se adelanten medidas para mejorar la situación.

Ver SGK-PLANET. Preguntas frecuentes acerca de contaminación y escasez de agua.

Contaminación del aire

A partir de los años 1950, la concentración de contaminantes a escala global alcanzó niveles nunca vistos. Esta etapa de los primeros años posteriores a la Segunda Guerra Mundial algunos especialistas la han denominado “la gran aceleración”. Luego, la actividad y expansión humana siguieron en aumento, al igual que la contaminación del aire y la atmósfera, producto de las emisiones de combustibles fósiles y la deforestación masiva e incendios intencionales de los bosques. Debido a ello a los 1970 algunos los consideran como los “años de la hiperaceleración”.

Desde entonces, asistimos al progresivo deterioro del medioambiente por la expansión de megaciudades, tierras de cultivo, la cría de ganado, el uso masivo de fumigantes, la incorporación de decenas de millones de vehículos automotores al tráfico, etc.

A consecuencia de todo esto, la contaminación del aire en algunas ciudades ha alcanzado niveles alarmantes, causando enfermedades respiratorias, alergias y otras patologías.

Ver SGK-PLANET. Preguntas frecuentes acerca de la contaminación del aire.

Contaminación y degradación de los suelos

En la actualidad, la velocidad de la pérdida de sustratos, esa capa superior del suelo donde se desarrollan las plantas, es mayor a la velocidad con la que se forman. Los suelos se están perdiendo debido a la contaminación y degradación como consecuencia de las actividades antropogénicas que afectan los ciclos naturales de su recuperación. Ya hay quienes consideran al suelo como un recurso natural no renovable.

La contaminación de los suelos se debe principalmente a la introducción de agentes químicos que modifican su composición y afectan el crecimiento de la flora y fauna. Entre estos podemos citar la salinización, contaminación con sales de sodio en exceso, acidificación y el envenenamiento de las tierras y plantas mediante uso desmedido de pesticidas y abonos artificiales. Con el tiempo pueden penetrar los estratos inferiores y llegar a contaminar los mantos acuíferos, impidiendo su utilización como agua potable.

La degradación química de los suelos se debe fundamentalmente a la utilización de fertilizantes no naturales, al uso exagerado de agentes fitosanitarios. Estos métodos, además de abonar los campos de cultivo, eliminar las enfermedades y las plagas, también producen la extinción de la materia orgánica necesaria para la formación del humus, imprescindible para el buen crecimiento de las plantas.

Todo esto tiene consecuencias mucho más serias de lo que se piensa. Por ejemplo, la disminución parcial o total de la capa vegetal incrementa las regiones desérticas o semidesérticas y produce la extinción de microorganismos necesarios para la vida de un ecosistema. Además, coloca en riesgo la continuidad de las cadenas tróficas o alimentarias, un peligro para el equilibrio biológico, imprescindible para sostener la vida en el planeta.

Ver SGK-PLANET. Preguntas frecuentes acerca de contaminación y degradación de los suelos.