El alma de doña Protocolo de Kioto anda penando por ahí
De un tiempo para acá José no ha podido dormir bien. Él fue quien colocó aquella económica esquelita, esas de la oferta de las doce palabras: “Ha muerto doña Protocolo de Kioto, vendo casa en bonita playa”, tal como lo relaté hace dos años y pico, parte de una trilogía a la cual le hice [...]