La primera conferencia, la COP1, se realizó en Alemania, en 1995, la cual produjo el Mandato de Berlín, especie de catálogo de compromisos bastante indefinidos, que permitía a los países escoger las iniciativas ajustados a sus necesidades particulares. La COP1 tuvo la importancia de ser el primer foro que reconocía oficialmente la existencia de problemas relativos al clima. En la COP2, Ginebra, 1996, se convino en la no uniformidad de soluciones por países. En las reuniones anuales han participado expertos en medio ambiente, ministros o jefes de estado y organizaciones no gubernamentales.